El Girona empezó a mostrar una mejora importante tras afrontar duras derrotas ante el Paris Saint-Germain en el Parque de los Príncipes y el Feyenoord en Montilivi. Con su primera victoria histórica en la Liga de Campeones ante el Slovan Bratislava, el equipo se impuso por 2-0, gracias a los goles de Miguel Gutiérrez y Juanpe. Esta victoria no sólo le permitió sumar sus primeros puntos en la competición, sino que también alimentó la presión acumulada entre resultados anteriores.
El principal objetivo del Girona es avanzar a la siguiente fase del torneo. Si encontrar un lugar entre los mejores ojos parece un objetivo casi inevitable dada la contundente derrota en Eindhoven (4-0), el equipo sigue luchando por clasificarse para los octavos de final. Sin embargo, el partido contra el PSV dejó claro que cada partido será un desafío considerable. Malik Tillman, que acabó el partido con un gol y dos asistencias, lideró al equipo de Peter Bosz en una actuación dominante ante el Girona.
Desde el principio del partido entendí que la Liga de Campeones requiere la máxima concentración. En el minuto 15, un error del Girona permitió al PSV abrir el marcador. Bojan Miovski tuvo una clara oportunidad de incorporarse a los suyos, pero cayó ante el portero Walter Benítez, dando rápida respuesta al PSV. Tillman, tras desconectarse la defensa del Girona, asistió al primer gol, marcando el inicio de su gran hazaña.
El jugador estadounidense no tardó en reaparecer, aumentando la ventaja hasta el 2-0 en el minuto 33. Con una brillante jugada que comenzó por el lado izquierdo del campo, ingresó al área y venció al portero Paulo Gazzaniga con un disparo raso. disparo. Tillman no sólo se separó del marcador, sino que también contribuyó con una asistencia al tercer gol, marcado por Johan Bakayoko. Su activación fue impresionante, con seis remates y seis pasos claves, destacándose en el campo.
Este año, Tillman ha demostrado ser un mediocampista ofensivo y versátil, capaz de jugar en múltiples posiciones, incluido el mediocampo y la banda. Su imponente físico (1,87 metros) y su habilidad sobre el terreno de juego le han convertido en uno de los jóvenes talentos más prometedores de Europa. Con un excelente sentimiento táctico y un fuerte compromiso defensivo, el jugador demostró un potencial importante que el Bayern de Múnich no puede intentar dejarle por sólo 12 millones de euros.
Tillman se formó en el Bayern y pasó la temporada 2022/23 transferido al Rangers, donde su hijo perdió tiempo. Posteriormente, el PSV se interesó por su fichaje y pagó un millón de euros por su traspaso. Bajo la dirección de Peter Bosz, jugó 40 partidos, marcó nuevos goles y dio 15 asistencias, ayudando al equipo a ganar la Eredivisie. Esta temporada va camino de superar sus propias estadísticas, ya que suma seis goles y cuatro asistencias en apenas 16 partidos.
Aunque su valor de mercado actual se estima en 25 millones de euros, su contrato estará vigente hasta 2028, lo que sugiere que el PSV podría recibir una tarifa mucho más alta si deciden traspasarlo. Con sus habilidades y desempeño en el campo, es evidente que Tillman tiene el potencial de convertirse en un jugador clave en cualquier equipo. La pregunta es dónde podrá jugar en el PSV con Bosz y cómo evolucionará su carrera en el fútbol europeo.