El mundo estaba un día convulso en el mercado de fichajes de las principales asociaciones europeas, así como en las categorías inferiores. Hubo traspasos, cesiones y operaciones de última hora, con el ansiado contrato de Jay Stansfield, delantero de 21 años, que quedó libre por el Birmingham City por 17,7 millones de euros. Una cifra que sería normal si la hubiera pagado un club de la Premier League, como el Liverpool o el Chelsea, pero sorprendente porque el Birmingham City juega en la League One, la tercera división del fútbol inglés.

El club confirmó el fichaje de Stansfield procedente del Fulham (Premier League) por 15 millones de libras (17 millones de euros) más 5 millones en variables y el 20% de los derechos en una futura venta, convirtiéndose en el traspaso más caro de la historia de la League One.

Antes de este ataque, el récord pertenecía a Christoph Klarer, centrocampista del Darmstadt 98 (segunda división alemana), por el que el Birmingham City había pagado 4 millones de libras este verano. De esta forma, el club cortó el gas en Stansfield.

Este fichaje supuso una importante diferencia económica entre la Liga Uno y la Primera División española. Según Transfermarkt, los 40 equipos de esta última categoría han gastado en total tan solo 6 millones de euros, siendo cuatro de ellos fichajes del Barcelona B. Además, solo cinco clubes de esta división han cerrado contratos, la mayoría de ellos filiales, entre ellos el Atlético de Madrid por el Hércules.